Pero lo más significativo es que es capaz de aguantar embestidas tan fuertes como la que la SEC acaba de lanzar sobre el mercado, indirectamente, a través de Coinbase. El supervisor estadounidense ha lanzado una advertencia contra la mayor plataforma de contratación de criptomonedas de Estados Unidos por posible incumplimiento de las leyes del mercado de valores. Una decisión que ha dejado perplejo a muchos por el momento elegido.
No hay demasiados detalles sobre el por qué de este aviso que sobresalta a un mercado muy sensible a lo que ocurre en el universo paralelo de las plataformas de contratación. Muy cercano está el precedente de FTX, cuya caída se trasladó con una violencia extraordinaria a los precios de los activos. Ha habido reedición a mucha menor escala con el cierre de Silvergate Bank, y todo hace indicar que no habrá descanso a corto plazo.
De momento, la sangre no llega al río con el aviso a Coinbase, cuya gran caída en bolsa este jueves no arrastra de forma significativa a las criptos. De hecho, el bitcoin se permitía el lujo de subir alrededor de un 5%, en una demostración de que el momento le favorece. Está haciendo una demostración de fuerza sin precedentes en los últimos meses: ahora los inversores ven el vaso medio lleno.
"Cuanto peor le va a los bancos tradicionales, mejor para las criptomonedas. Al fin y al cabo, su auténtico valor es el de alternativa a las monedas fiduciarias. Al fin y al cabo, las criptomonedas no podrían haber sido posibles sin la crisis financiera de 2008. En este sentido, la caída de SVB es una estupenda tarjeta de visita para el bitcoin, el ethereum y compañía", señalan en fuentes financieras.
Frente a subida de tipos
También ayuda, claro está, que hay muchas posibilidades de que se detenga la subida de tipos de interés en Estados Unidos tras el último repunte de 25 puntos básicos. Ahora toca no apretar demasiado las cuerdas a los bancos de la primera economía del mundo que pueden tener problemas de liquidez con tipos mucho más altos. Miel sobre hojuelas para las criptomonedas, que cuando ya estaban sonando las alarmas han visto como el escenario ha cambiado radicalmente en un par de semanas.
No es casualidad que el bitcoin se haya disparado más de un 30% desde la caída de SVB. Por el camino, todo el sector de las criptomonedas ha recuperado cerca de 400.000 millones de dólares en lo que va de año. Los máximos siguen a años luz, pero lo que importa es que los inversores vuelven la mirada hacia un activo que hace 15 días parecía condenado a permanecer durante mucho tiempo en tierra de nadie.
"Los problemas de la banca están provocando una redistribución de las carteras de inversión de los grandes fondos hacia otros activos. Y las criptomonedas, todavía de una forma muy tímida, empiezan a entrar en el juego. A estos niveles y en pleno cambio de escenario de tipos de interés, el riesgo de entrada no es demasiado alto. Muchos gestores creen que hay una oportunidad", señalan en una gran firma internacional.
En pleno despegue, la SEC se cruza en el camino con una advertencia de Coinbase que ha encendido de nuevo las alarmas en el universo cripto. Pero esta vez las criptomonedas están aguantando mucho mejor el envite de la incertidumbre. Recuperadas por las carteras por la crisis de confianza en la banca tradicional, tienen una oportunidad de oro para salir definitivamente del agujero.