La junta ha aprobado repartir un dividendo en efectivo de 0,30 euros por acción, con cargo a reservas.
Álvarez-Pallete se ha comprometido ante los accionistas a seguir apostando por los cuatro mercados clave como España, Reino Unido, Alemania y Brasil; seguir creciendo a doble dígito en Telefónica Tech; conseguir reflejar su valor en la cotización; crear valor con Telefónica Indra y controlar la exposición del grupo en Hispanoamérica.
El máximo ejecutivo de Telefónica ha anunciado igualmente que su objetivo es avanzar “en nuestro modelo operativo” y que el grupo “crezca en ingresos y en Oibda”. Todo ello acompañado de un esfuerzo inversor “relevante” pero “controlado” y con “una activa política activa de retribución al accionista”.
Rebaja de la deuda en 23.000 millones
Además, ha subrayado que el grupo ha aumentado el patrimonio neto en 9.300 millones de euros, y reducido la deuda neta en más de 23.000 millones en los últimos años. Paralelamente, “hemos realizado operaciones corporativas por casi 81.000 millones de euros, incluyendo la mayor operación de nuestra historia, la fusión de O2 y Virgin Media en Reino Unido, que supimos ver y cerrar durante el periodo de confinamiento; algo que nadie había hecho nunca”, ha señalado.
El presidente de Telefónica ha incidido especialmente en la transformación que ha sufrido la compañía en los últimos siete años. En cuanto a la base de clientes, se han superado los 383 millones y transformado los ingresos “para ser más relevantes”. “Hoy el 73% derivan de la banda ancha y servicios digitales, frente al 46% en 2015, ingresos que vienen del nuevo mundo”, ha dicho.
“Conseguimos construir más de cuatro millones de fibra, o lo que es lo mismo más de cinco viajes de ida y vuelta a la luna. Desplegamos casi 115.000 estaciones base de 4G y 5G y nuestras redes han transportado 128.000 petabytes de datos durante el último año, equivalentes al visionado de 6.400 millones de horas de vídeo en 4K”.
En cuanto al cobre, ha afirmado que se han desmantelado 110.000 toneladas de red de cobre, cerrado más 2.200 centrales y apagado también cerca del 50% de las redes de 2G y 3G.
Cambio de regulación
Álvarez-Pallete ha vuelto a reclamar un cambio de regulación sobre la compañía. En este sentido, ha destacado que no se puede regular esta compañía con las reglas de un mundo que ya no existe. “La regulación se creó para controlar a un monopolio incumbente de cobre que no existe ya”. “Somos otra compañía. Lo que gestionamos ya no son redes de comunicaciones, es algo mucho más potente. Hemos construido algo diferente y no puede regularse con reglas antiguas”, ha expresado.
El directivo ha insistido en que estamos ante un nuevo mundo que requiere nuevas reglas. “Reglas que equilibren el terreno de todos los actores; reglas que equilibren el terreno de juego; reglas que fomenten la colaboración en este nuevo mundo; reglas que incentiven el uso responsable y equitativo de estas nuevas redes”.
La junta ha aprobado el reparto de dividendo en efectivo de 0,30 euros que se abonará en dos tramos. El primer pago de 0,15 euros se realizará el próximo 15 de junio y el segundo el día 14 de diciembre de este año.
A la junta han asistido 30.167 accionistas que suman 3.358 millones de euros, equivalente al 58,15% del capital social. La compañía ha propuesto amortizar un 0,43% del capital, que supondrá reducir el mismo en 24,77 millones de euros, así como la facultad para crear nuevos programas de autocartera los próximos cinco años.